Danzar con el alma.

Danzar con el alma, llevar al escenario las pasiones y
desgarraduras del ser humano desde una mirada masculina fue lo que se propuso
el maestro Ernesto Alejo cuando fundó su compañía hace 15 años.



De entonces acá, ha sido un largo camino transitado con muchos tropiezos que en
ocasiones  invitaban a parar, pero donde  ante todo se impuso el
talento y la constancia. Gracias a ello la Compañía Danza del
Alma puede hoy exhibir un largo currículo con múltiples premios y una obra
consolidada.



Su reciente participación en el primer encuentro Cuba-Venezuela para las artes
escénicas confirma  una vez más la valía de esta compañía, la  que
también cada fin de año nos invita a bailar a casa del trompo.



 “Allí cada compañía llevó muestras de su trabajo de solos y duetos, pero
nosotros tuvimos la audacia de llevar casi todo el repertorio –explica Ernesto
Alejo- ello permitió que el público venezolano disfrutara de un amplio diapasón
de nuestras partituras coreográficas, por ejemplo   la obra Juego de
guerra puso de pie al público venezolano.   Nos presentamos en la Casa del artista y en el
Teresa Carreño.  En la clausura se decidió que la compañía fuera la que
cerrara el evento.”



Posteriormente, los bailarines de la compañía partieron hacia diferentes
estados para trabajar con pequeños proyectos e impartieron talleres de
creación.



“Yo creo que regresamos mejores personas y más grandes artistas y más
comprometidos con la danza y la capacidad humanista que debe tener todo
artista”, expresó Ernesto Alejo.



La compañía Danza del Alma se prepara ahora para participar del 13 al 17 de
abril en el evento de Danza en paisajes urbanos en La Habana.